DESIGUALDAD, ¿QUÉ PODEMOS HACER?

Anthony B. Atkinson nos muestra en su libro cuyo nombre da lugar al de ésta entrada, los diversos tipos de desigualdad y las diferencias que provocan en la sociedad y en el mundo. El autor, no apoya la idea de la igualdad total, pues no la considera ideal, no obstante si hay algo que tiene claro y que plasma en las más de 400 páginas de su libro, es que el nivel de desigualdad actual es excesivo y debe disminuir. 
Portada del libro "Desigualdad, ¿Qué podemos hacer?"-por Anthony B. Atkinson
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Dicho libro posee una estructura muy clara y se encuentra dividida en tres grandes partes que coinciden con el diagnóstico, las propuestas y las objeciones a las propuestas del segundo apartado. 
En primer lugar, hay que tener clara la diferencia entre la igualdad de resultado con la desigualdad de oportunidades, mientras que ésta última consiste en que todos parten de un mismo lugar, con las mismas ventajas y en total igualdad de condiciones, la igualdad de resultados consiste en que la recompensa sea igual para aquellos que participen.
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No obstante, ambas desigualdades son importantes y por ello hay que tenerlas en consideración. Pero, ¿por qué?
En primer lugar, no se puede ignorar el punto de partida, por ejemplo, dos personas pueden llegar a obtener el mismo puesto de trabajo sin necesidad de haber cursado los mismos estudios, así pues el hijo del dueño de la empresa parte de una ventaja procedente de antecedentes familiares, por lo que el resultado sería el mismo pero el camino a recorrer sería mucho más complicado por parte del chico que no posee antecedentes familiares. 
Por otro lado, hay que diferenciar entre igualdad competitiva e igualdad no competitiva. En una carrera, los premios dependiendo de las resultados son muy diferentes, no obstante, esto hace que el esfuerzo por parte de los participantes sea mayor y den lo mejor de sí mismos, lo cual en cierto modo hace que esa carrera sea más justa. Y por último, debemos de tener en cuenta que una desigualdad de resultados de hoy, conllevará a una desigualdad de oportunidades mañana. 
En ésta primera parte del diagnóstico, además se lleva a cabo la comparación con el punto de vista de otros economistas, además el autor se centra en presentar las diversas tendencias de la desigualdad en diferentes partes del mundo, así como la desigualdad salarial y a su vez desigualdades dentro de la desigualdad, como pueden ser la de género, generacional o temporal.
En el segundo capítulo se habla de la evolución de la desigualdad a lo largo de la historia, sacando cuestiones cómo si en el algún momento ésta desigualdad fue menor y que podemos aprender de las diversas etapas.
El tercer capítulo se puede resumir como el cambio tecnológico y la globalización cómo los principales determinantes de la desigualdad.
Sin embargo, el final de ésta primera parte del libro ya adelanta un concepto muy importante en todas las medidas que se plantean posteriormente: la redistribución.
Pese a que todo lo anterior evidentemente es importante y necesario para comprender el libro, lo más importante de éste son las medidas de actuación que propone Anthony B. Atkinson, 15 en concreto.

Propuesta 1: Fijar la dirección del cambio tecnológico. 
Es un cambio que debe ser encabezado por el Estado y fomentar las innovaciones que favorezcan la empleabilidad de los trabajadores.
Propuesta 2: Políticas públicas con balance adecuado entre los agentes sociales con criterios distributivos explícitos.
Básicamente se busca un marco legal que permita a los sindicatos representar mejor a los trabajadores.
Propuesta 3: El gobierno debe dar empleo público al salario mínimo a aquellos que lo buscan. 
Propuesta 4: Política salarial nacional, que establezca un salario mínimo por encima del nivel de satisfacción de las necesidades básicas.
En definitiva, asegurar unos buenos salarios mínimos y limitar los salarios máximos, además de establecer una política nacional de pagos.
Propuesta 5: Incentivos al ahorro.
El gobierno debería garantizar una rentabilidad del ahorro positiva en términos reales a través de bonos públicos.
Propuesta 6: Garantizarse un sueldo mínimo para todos aquellos mayores de edad.
El objetivo de ésta propuesta es que cada individuo mayor de edad posea algo de riqueza en el inicio de su vida adulta.
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Propuesta 7: Creación de una Autoridad de Inversión Pública. 
Una especie de entidad que se encargue de a búsqueda de nuevos inversores para aumentar la riqueza del Estado.
Propuesta 8: Recuperar una estructura de tipos más progresiva en el IRPF, hasta un tipo máximo de interés del 65% y un ensanchamiento de la base imponible.
Propuesta 9: Descuentos en el IRPF a las rentas de trabajo limitado.
Es decir, descuentos a las rentas más bajas.
Propuesta 10: Las transmisiones de capital, deberán ser gravadas con un impuesto progresivo sobre las rentas de capital acumuladas en el ciclo vital.
Propuesta 11: Creación de un impuesto proporcional sobre la propiedad.
Propuesta 12: Subsidios a los niños por una valor similar a mínimo de su subsistencia.
Teniendo en cuenta que esos niños son el futuro y aumentaría considerablemente el número de niños nacidos, pues muchas parejas no se atreven a aumentar la familia por el gasto que esto conlleva.
Propuesta 13: Se debería introducir una renta de participación nacional que complementara la protección existente, con la perspectiva de una renta básica por hijo en la Unión Europea. 
Propuesta 14: Ofrecerle una pensión a todas aquellas personas adultas y mayores, aumentando el nivel de sus cuantías y cobertura.
Propuesta 15: Los países deberían donar de ayuda un 1% de su Renta Nacional destinado a los países que lo necesitan para su desarrollo. 

A estas medidas brevemente citadas se le plantean una serie de objecciones a las que el autor responde. Algunas de ellas son:
-Una distribución más igualitaria puede reducir el crecimiento económico. 
A ésto, Atkinson responde que un pastel más pequeño pero mejor repartido puede ser más beneficioso que uno de mayor tamaño y las distribuido.
-Son medidas costosas.
Es cierto que al corto plazo sí, aun asi no lo son de iagual magnitud si lo medimos en términos de eficiencia.
-Desincentivos por parte de los trabajadores.
Éstas prestaciones se pagarían solo a los que pierden sus empleos y se deberían subir los salarios para evitar correr éste riesgo.
-Pérdida de competitividad ante los países emergentes.

Tan solo hay que mirar al pasado y recordar que fue en el sXIX, cuando comenzaron a formarse los Estados de bienestar europeos cuando más se desarrolló la globalización.
En definitiva, éste post no es más que una breve síntesis del contenido del libro. Yo animo a su lectura completa, pues realmente vale la pena. 

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